La vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, quien es la virtual candidata a la presidencia por el Partido Demócrata tras retirarse de la reelección el mandatario Joe Biden, ha evocado su pasado como fiscal para arremeter contra su contrincante republicano y expresidente Donald Trump.
«Sé bien cómo son los de su calaña«, dijo Harris al señalar que el también magnate inmobiliario es el primer expresidente condenado por un crimen en la historia democrática estadounidense.
Para compararse con Trump y asegurar que lo hará rendir cuentas, Harris comenzó su mitin en Milwaukee, el primero desde que la noche del lunes se asegurara matemáticamente la nominación demócrata, recordando su trayectoria como fiscal, incluyendo su cargo como fiscal general de California.
Como fiscal, me enfrenté a delincuentes de todo tipo: aquellos que abusaban de mujeres, estafadores que engañaban a consumidores, tramposos que violaban las normas para beneficio propio. Así que escúchenme bien: conozco a los tipos de la calaña de Trump
Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos.
Según el recuento de la campaña, las 3.000 personas que se congregaron en un instituto de Milwaukee, en Wisconsin, recibieron sus palabras con ovaciones. Harris fue recibida con entusiasmo por los asistentes, quienes aplaudieron, vitorearon y corearon su nombre: «¡Kamala, Kamala!».
Sin retroceder
Uno de los momentos más emotivos ocurrió cuando Harris comenzó a mencionar algunas de las políticas que Trump podría poner en marcha si vuelve a la presidencia, como limitar el acceso a la atención médica para personas con enfermedades crónicas como el asma, algo que la reforma sanitaria de Barack Obama (2009-2017) había eliminado.
Estados Unidos ha probado estas políticas económicas fallidas antes, pero no vamos a retroceder. No vamos a volver atrás. Les diré por qué no retrocederemos, ¡porque la nuestra es una lucha por el futuro!
Kamala Harris, vicepresidenta de los Estados Unidos.
«¡No vamos a volver atrás!», «¡no vamos a volver atrás!» corearon en respuesta los asistentes con tal entusiasmo que Harris se vio obligado a hacer una pausa, sonriendo ante la efusividad de la multitud.
Harris intentó en todo momento diferenciarse claramente de Trump. Mientras que Trump fue declarado culpable de 34 cargos por falsificar registros comerciales para ocultar una relación con la actriz Stormy Daniels en abril pasado, destacó cómo ella se dedicó a poner a criminales entre rejas durante su trayectoria como fiscal, que culminó con el cargo de fiscal general de California (2011-2017).
Al afirmar que las grandes corporaciones y los multimillonarios están detrás de la campaña de su oponente republicano, la vicepresidenta profundizó estas discrepancias al caracterizar su campaña como un movimiento «impulsado por el pueblo» y comprometido con «la clase media estadounidense».
La campaña se vio obligada a trasladar el acto a un recinto de mayor capacidad el lunes por la tarde debido a la intervención de Harris. Uno de los miembros del equipo electoral demócrata informó a EFE que el mitin fue el más concurrido hasta el momento, con más de 3.000 personas, superando los del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.
Este fue el primer mitin de Harris después de que Biden pusiera fin a su campaña a la reelección el domingo y respaldara a su vicepresidenta, quien se ha convertido matemáticamente en la nominada demócrata solo 36 horas después de haber iniciado su campaña electoral.
En la Convención Nacional Republicana que se llevó a cabo hace unos días, Harris pronunció su discurso en Milwaukee, la misma ciudad donde Trump fue designado como el candidato de esa fuerza política para las elecciones de noviembre y eligió al senador JD Vance como su compañero de fórmula.
«¡El camino a la Casa Blanca pasa por Wisconsin!«, exclamó en un momento de su discurso Harris, en reconocimiento de la importancia de ese estado, en lo que fue su quinta visita este año.
Consolidar el muro azul y la respuesta de Trump
El término «muro azul» se refiere al conjunto de estados, incluyendo Michigan y Pensilvania, que votaron por el Partido Demócrata de manera uniforme entre 1992 y 2012 y se consideran esenciales para el éxito electoral del partido.
Mientras tanto, el expresidente Donald Trump afirmó que la vicepresidenta sería más sencilla de vencer que Joe Biden en las elecciones de noviembre.
«Ella es mucho más radical que él (…) así que creo que ella debería ser más fácil» de derrotar en las urnas, afirmó Trump, candidato republicano a la Casa Blanca, en una llamada con periodistas.
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