La sección 21 de de la Audiencia de Barcelona (España) ha resultó dejar en libertad al futbolista brasileño Dani Alves, por mayoría y voto particular, después que su defensa solicitara la fianza, para eludir la prisión provisional, mediante el pago de una multa de un millón de euros y la retirada de sus dos pasaportes (brasileño y español). De esta manera, y tras verificarse el pago, se ha decretado su libertad provisional.
Alves tendrá las medidas cautelares de no salir de España, y además, compadecer semanalmente de carácter presencial a la Audiencia Provisional y todas las veces que sea llamado y requerido por la justicia.
Además, se le prohíbe el acercarse ante la denunciante a una distancia mínima de mil metros de su hogar, trabajo u otro sitio que frecuente. Tampoco podrá comunicarse con ella a través de ningún tipo de medio hasta que recaiga sentencia firme.
Desde el tribunal se aclara que “conviene recordar que la función de la prisión provincial no puede ser en ningún caso la de adelantar los efectos de una hipotética pena que pudiera serle impuesta al acusado” y que tampoco debe ser la de “impulsar la investigación del delito u obtener pruebas o declaraciones”, argumentando que, si estos son los fines, la privación de la libertad estaría excediendo los límites marcados por la propia Constitución. Bajo esta explicación, considerando el tribunal que cada escenario es merecedor de su propia valoración, se asienta la base de la libertad condicional del brasileño.
Riesgo de fuga
Uno de los motivos que ha sido parte fundamental del debate que lleva a este punto ha sido el riesgo de fuga; sobre él dice el tribunal que considera dos factores: uno objetivo, “constituido por la gravedad del delito imputado y de la consiguiente pena, que justifica la inicial adopción de la medida”, y otro subjetivo, “que ha de tener en cuenta el transcurso del tiempo como factor mitigador del criterio anterior”. Este segundo punto, se recoge en el auto, obliga, transcurrido un tiempo de prisión preventiva, a valorar la circunstancias personales y la posible necesidad de mantenimiento de la medida.
El jugador fue encarcelado por primera vez el 20 de enero de 2023 después de ser condenado a cuatro años y seis meses de prisión por la agresión sexual a una joven en la discoteca Sutton de la ciudad condal durante la madrugada del 31 de diciembre de 2022. Tanto la defensa, la fiscalía como la acusación particular han recurrido la sentencia por motivos distintos, y ahora se encuentra a la espera de la sentencia definitiva.
Según el diario español, ‘La Vanguardia‘, en lo referente a la fianza el deportista sudamericano recurrió al padre de Neymar para abonar la fianza que le permite recuperar su libertad hasta el día de mañana jueves 21 de marzo ya que no se efectuó el pago en horas de la oficina.