Un empleado de la industria de la aviación que expresó sus preocupaciones en cuanto a la seguridad y denunció represalias por parte de su compañía, falleció debido a una breve enfermedad, semanas después de la muerte de otro empleado que también denunció a Boeing, informaron los abogados que representaban a ambos.
El abogado Robert Turkewitz informó que Joshua Dean, de 45 años y residente de Wichita, Kansas, falleció el martes después de recibir una serie de diagnósticos, incluyendo gripe, neumonía y SARM, lo que obligó a su familia a solicitar una autopsia.
“Era una persona sana que comía bien y hacía ejercicios”, declaró Turkewitz a NBC News. “Así que parece extraño que partiera tan rápido”.
Dean estaba enfermo durante dos semanas y tenía dificultades para respirar, lo que lo obligó a usar un respirador artificial.
“Nuestros pensamientos y oraciones están con Josh y su familia”, afirmó en un comunicado Brian Knowles, otro abogado que representa a Dean. “El fallecimiento de Josh es una pérdida para la comunidad de la aviación y para los pasajeros aéreos Poseía un tremendo valor para defender lo que consideraba verdadero y correcto, y planteó cuestiones relacionadas con la calidad y seguridad (del transporte aéreo)”.
Turkewitz y Knowles también representaron a John Barnett, un hombre de 62 años de Louisiana que falleció el 9 de marzo de una herida de bala autoinfligida en Charleston, Carolina del Sur.
Barnet se encontraba en la ciudad para prestar declaración como parte de una acción legal federal contra Boeing. Sus abogados informaron que a finales de este año su caso se presentará ante un juez de derecho administrativo.
En 2017, Barnett, quien trabajó en Boeing durante más de 30 años, informó a las autoridades de aviación sobre fallas de seguridad potencialmente «catastróficas» en el avión 787 Dreamliner.
Dean había trabajado como auditor de calidad para Spirit AeroSystems, que era un proveedor de Boeing. Alegó que los gerentes no actuaron en caso de que los aviones 737 MAX presentaran defectos de fabricación.
A pesar de que no era uno de los demandantes, se mencionó en una acción de accionistas de 2023 contra Spirit.
Denuncias
Dean denunció «agujeros mal perforados» en una pared en la parte posterior de los aviones MAX, presentando «conclusiones formales por escrito a su gerente», pero Spirit «ocultó el defecto», según la demanda. Los agujeros mencionados podrían causar grietas que podrían comprometer la estructura del avión.
“Ahora bien, no estoy diciendo que ellos no quieren que inspecciones los trabajos. Lo quieren”, declaró a NPR este año. “Pero si causas demasiados problemas, recibirás el ‘tratamiento Josh’. Te pasará lo que a mí”.
Dean fue despedido de la empresa el 26 de abril de 2023, en lo que él consideró un acto de represalia.
“Creo que estaban enviando un mensaje a los demás”, comentó Dean. “Si eres demasiado ruidoso, te silenciamos”.
Aerolínea lamenta su muerte, pero guarda silencio por sus acusaciones
Spirit expresó su pesar por la muerte de Dean en un comunicado, pero evitó hablar sobre sus acusaciones. El proveedor informó previamente a NPR que está completamente en desacuerdo con las afirmaciones contenidas en la demanda y que está llevando a cabo una acción legal en contra del caso.
“Nuestros pensamientos están con la familia de Josh Dean”, afirmó Joe Buccino, portavoz de Spirit, en el comunicado. “Esta pérdida repentina es una noticia chocante en Spirit y para sus seres queridos”.
El estrés de los últimos años podría haber hecho mella en Dean, comentó Turkewitz.
“Nos dijeron que el estrés puede debilitar el sistema inmunológico y te hace más susceptible a la neumonía, la gripe y el SARM”, señaló. “Había estado sometido a mucho estrés por haber denunciado los hechos y haber sido despedido, según creía, como consecuencia de ello. Estaba tratando de llamar la atención sobre el tema y nadie le hacía caso”.
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