Una web que se enfoca en organizar recorridos para visitar conciertos en Guadalajara, México, publicó un artículo sobre «un evento histórico» ocurrido en lo que se conoce como «Selectikonova Valley», que se describe como «el primer concierto donde actuó un robot».
A pesar de ser llamativo, especialmente debido a las imágenes creadas por IA, las reacciones de los usuarios acusaron a los autores de «difundir noticias falsas» y «compartir contenido creado por IA». La organización, conocida como «agencia de viajes», ofreció disculpas mesuradas afirmando que habían compartido la publicación para «conocer la opinión de las nuevas tecnologías de entretenimiento que llegarán en algún momento».
Lo notable fue la cantidad de personas que no se dejaron engañar por una noticia falsa, aunque algunos no se sorprendieron porque aseguraron que «está eso más cerca de lo que creemos». Por lo tanto, después de una breve investigación para descubrir el origen de la «noticia», descubrimos esto.
Bastó revisar el buscador de confianza para descubrir que solo una página más, dedicada en su totalidad a los temas de la inteligencia artificial, había creado esta publicación en su página de Facebook. Se trata de Techsol, quienes, al menos según la publicación, están en San Francisco y describen el texto en ruso.
Luego de que hicieran la publicación el pasado 13 de junio con una serie de hashtags aleatorios para ganar visualizaciones, otra página web llamada newo.ai replicó el mismo escrito sin modificar nada del texto, aunque destacaron tres puntos que consideran “key highlights”: el espectáculo del robot con tecnología avanzada y sus Apple M3 Pro Chips, el setlist que se mandó el robot y las interacciones de este con la supuesta audiencia.
Sí, para que una noticia falsa tenga éxito, es necesario usar una gran cantidad de engaño para convencer a los lectores de que es verdadera. No importa si esto implica, como en este caso, mencionar a empresas conocidas de la industria como TechFusion, OpenAI, Apple o HyperSound, o actores como Leonardo DiCaprio, Jessica Chastain o Mark Zuckerberg.
Tal vez sea posible deducir de inmediato que el problema no radica en la inteligencia artificial en sí misma, ni en su uso como herramienta, sino en su uso irresponsable que solo tiene como objetivo difundir información errónea. Por lo tanto, los usuarios son el problema, no la herramienta. Todavía hay mucho camino por recorrer.
Te puede interesar: