El uso de lentes de contacto ha ganado popularidad. Esta tecnología resulta más cómoda que el uso de gafas convencionales y, además, en algunos casos puede detener el aumento de la graduación ocular. Recientemente, se ha presentado al público un nuevo modelo que podría ayudar en la recuperación de lesiones oculares. Gracias a una tecnología innovadora, este nuevo material permite la inclusión y suministro gradual de medicación, agilizando así el tratamiento.
Unas nuevas lentillas permitirán la recuperación de lesiones oculares
Las lesiones oculares pueden ser frecuentes en el ser humano, una cuestión que requiere de una delicada recuperación para evitar secuelas en el medio y largo plazo. En este sentido, la Facultad de Optometría y Ciencias de la Visión de la Universidad de Waterloo ha creado una solución para agilizar el proceso de sanación. El sistema consiste en incorporar la medicación que se requiere en una lente de contacto, la cual es capaz de suministrar correctamente el tratamiento a lo largo de un periodo de tiempo determinado.
El material de la lente serviría como un vendaje que incluye los aditivos necesarios para ayudar en el cierre de heridas, especialmente en la córnea. La clave de esta tecnología radica en la capacidad del material para detectar la gravedad de la herida, lo que determina la cantidad de medicación liberada. A diferencia de las lentillas inteligentes, este modelo no tiene como objetivo mejorar la visión.
El material del que está compuesto esta lente de contacto deriva del metacrilato de gelatina, un subproducto del colágeno. Aun así, el elemento clave de esta tecnología radica en la metaloproteinasa de matriz 9 (MMP-9). Se trata de una sustancia que se encuentra en el tejido ocular que tiene como principal función reparar aquellos tejidos que han sufrido una cierta abrasión. La liberación de esta partícula sirve para acelerar el proceso de curación, convirtiendo a esta propuesta en una de las soluciones alternativas más interesantes del año.
Según las conclusiones del estudio, el sistema contiene una enzima que se activa al entrar en contacto con el ojo a una cierta temperatura, lo que permite conservar las propiedades del fármaco por más tiempo. Hasta ahora, la innovación en lentes de contacto se había centrado en la inteligencia artificial, pero esta nueva propuesta vuelve a destacar la importancia de la salud. Se espera que en los próximos meses se realicen nuevos estudios para llevar al mercado esta innovadora tecnología.