El domingo (7/4/24), un juez de la Corte Suprema de Brasil ordenó la apertura de una investigación contra Elon Musk, dueño de la plataforma X, quien lo acusó de «censura» y solicitó su renuncia de esa red social.
En una decisión judicial transmitida por la AFP, el juez del Supremo Tribunal Federal (STF) Alexandre de Moraes mencionó la presunta «instrumentalización criminal de X», anteriormente conocida como Twitter, por parte del magnate y líder de la empresa eléctrica Tesla y la empresa aeroespacial SpaceX.
Además, se determinó que «la red social X debe abstenerse de desobedecer cualquier orden judicial, incluso reactivando una cuenta cuyo bloqueo haya sido ordenado por el Tribunal Supremo», de lo contrario, enfrentaría una multa de 100.000 reales (alrededor de 18.300 euros, más de 19.700 dólares) por perfil reactivado.
“Las redes sociales no son tierras sin ley”, subrayó en mayúsculas en su sentencia.
Musk comenzó una serie de ataques contra el alto magistrado en X el sábado por la noche, en particular afirmando que iba a impugnar sus decisiones legales «levantando todas las restricciones» que le impusieron, aunque sin proporcionar más detalles.
Es probable que perdamos todos nuestros ingresos en Brasil y tengamos que cerrar nuestras oficinas en ese país. Sin embargo, los principios son más importantes que las ganancias”, afirmó.
El domingo, volvió a atacar y exigió la renuncia o salida de Alexandre de Moraes. Este juez ha cometido una traición descarada y en repetidas ocasiones tanto a la Constitución como al pueblo de Brasil. «Debería dimitir o ser destituido», dijo en la red social que ganó mayoritariamente en 2022.
El multimillonario también se comprometió a publicar «todas las solicitudes (judiciales) de Alexandre de Moraes y cómo estas solicitudes violan la ley» en un futuro cercano.
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