El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, se autoproclamó el triunfador de los comicios electorales a los que acudieron de manera masiva los votantes a falta de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de ese país se pronuncie de manera oficial.
Como es su estilo mediante su cuenta en la red social de X, antes Twitter, anunciaba al mundo que era el virtual triunfador con una encuesta a boca de urna realizada por la empresa Cid Gallup, dejando extremadamente atrás a sus rivales en la papeleta electoral.
Con un 31% de votos escrutados, el candidato del gobernante partido Nuevas Ideas cuenta con un aplastante apoyo de casi 1.300.000 votos.
A enorme distancia en segunda posición se encuentra Manuel Flores, aspirante del FLMN, con apenas 110.000 votos.
“Este día, El Salvador ha roto todos los récords de todas las democracias en toda la historia del mundo”, aseguró Bukele tras conocerse los primeros resultados. “Nunca un proyecto ganó con la cantidad de votos que hemos ganado este día. Es literalmente el porcentaje más alto de toda la historia”.
Triunfo aplastante
El mandatario que gobernará la nación centroamericana un periodo más, del 2024 al 2029, se reunió más tarde en el Palacio Presidencial para festejar el arrollador triunfo de su partido Nuevas Ideas (N) anunciando a sus miles de militantes que su triunfo se extendió a la Asamblea Legislativa, según sus datos.
“Y no solo hemos ganado la presidencia, sino que hemos ganado la Asamblea Legislativa con 58 de 60 diputados como mínimo”, afirmó entre gritos de “Sí se pudo” vitoreados por sus seguidores. Hasta el momento, no se publicaron resultados oficiales de la votación para elegir los miembros de la Asamblea.
“Sería la primera vez que en un país existe un partido único en un sistema plenamente democrático. Toda la oposición junta quedó pulverizada. El Salvador este día ha vuelto a hacer historia”, agregó.
La reelección
En caso de confirmarse los datos por el ente rector de los comicios, el actual mandatario sería el primero en ser reelecto de manera consecutiva en ese país desde 1983 se promulgó la actual Constitución, que prohíbe la reelección inmediata.
Cabe recordar que los jueces de la Sala Constitucional-electos por la Asamblea Legislativa en la que N es la mayoría- los escogió y así desde sus cargos han realizado una interpretación de los artículos de la Carta Magna que prohibía la reelección, dándole al mandatario luz verde para buscar un nuevo periodo de cinco años en el Ejecutivo.
Gobiernos de otros países como México, China, Guatemala, Honduras, Panamá o Paraguay felicitaron públicamente a Bukele incluso cuando aún no se contaba con datos oficiales del escrutinio.
Resultados
Más allá de los resultados, en los que daban a lo largo de la campaña como favorito a Bukele, las elecciones nivel Ejecutivo y Legislativo, estuvo destacada por el retraso en la divulgación de información del TSE.
El ente electoral justificó su demora en publicar los primeros resultados oficiales (que no llegaron hasta pasadas cuatro horas desde el cierre de las urnas) con el hecho de que algunos ciudadanos no pudieron votar en centros ubicados en el extranjero pese a haber llegado antes de la hora de cierre oficial, por lo que el organismo les garantizó que podrían ejercer su derecho.
Seguridad y derechos humanos
A lo largo de la campaña varias encuestas daban como virtual triunfador a Nayib Bukele, quien asumió la presidencia en 2019, hasta con un 90% de intención de voto.
Durante su primer mandato, los niveles de violencia se redujeron a mínimos históricos en El Salvador, que en 2015 llegó a ser el país con mayor número de homicidios per cápita en todo el mundo y ahora es uno de los más seguros de América.
Más no obstante, su «guerra contra las pandillas» y el régimen de excepción vigente desde hace dos años le han valido una gran cantidad de criticas de parte de la oposición y organismos de defensa de derechos humanos de ese país y el extranjero.
Además su administración ha sido cuestionada por presuntas ejecuciones extrajudiciales, torturas, detención de inocentes, entre otras.
Desde que comenzó el régimen de excepción, bajo el que varios derechos constitucionales permanecen suspendidos, más de 75.000 personas fueron detenidas por presuntos vínculos con las pandillas de modo que El Salvador se convirtió en el país con la tasa de encarcelamiento más alta del mundo.
durante el discurso que ofreció a los miles de salvadoreños que han acudido a celebrar su virtual triunfo electoral, el presidente Bukele le dedicó unas palabras a la prensa y organizaciones que critican su política de seguridad.
“Dicen algunos que no viven en nuestro país que los salvadoreños viven oprimidos, que no quieren el régimen de excepción, que viven con miedo al gobierno (…). El pueblo salvadoreño habló, no solo fuerte y claro, sino de la manera más contundente en toda la historia de la democracia”, dijo.
“Si eso no los convence, señores periodistas, señores de las ONG, de los organismos internacionales, de la ONU, la OEA… si eso no los convence, nada los va a convencer”.
En una encuesta de la Universidad Francisco Gavidia publicada en enero, el 86% aseguró vivir más seguro y solo un 12% dijo que, si antes eran las pandillas las que infundían terror, ahora son los policías y militares los responsables de que la situación continúe igual, demostrando que la gran mayoría del pueblo salvadoreño esta de acuerdo con la política de «mano dura».
“Los salvadoreños le hemos dado el ejemplo al mundo entero de que cualquier cosa se puede solucionar, cualquier problema se puede arreglar, si hay voluntad de hacerlo», remarcó.
A lo largo de su discurso de la vitoria, el líder del Ejecutivo no ofreció pistas sobre que rumbo tomará para este segundo periodo en el poder.
“Ahora en estos próximos cinco años, esperen a ver lo qué vamos a hacer. Porque seguiremos haciendo lo imposible, seguiremos demostrando al mundo el ejemplo de El Salvador”, se limitó a decir.
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