El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, se ofreció este domingo para «solucionar» la crisis de inseguridad y violencia causada por los grupos armados en Haití, luego de haber enfrentado con éxito a las pandillas que afectaban a su propio país.
«Bukele expresó: ‘Podemos resolverlo. Sin embargo, necesitaremos una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, el consentimiento del país anfitrión y cubrir todos los gastos de la misión'», según un mensaje en inglés publicado en la red social X, el cual fue luego replicado por la Secretaría de Prensa de la Presidencia.
Sin embargo, el presidente salvadoreño no proporcionó detalles sobre cómo abordaría la crisis en Haití, donde las pandillas armadas han desencadenado una espiral de violencia, especialmente en la capital, Puerto Príncipe. La situación se ha caracterizado por ataques a hospitales, escasez de alimentos e infraestructura bloqueada.
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha adoptado un enfoque autoritario para reducir la violencia en su país. Recientemente, se ofreció a «arreglar» la crisis de inseguridad y violencia provocada por los grupos armados en Haití, después de haber enfrentado con éxito a las pandillas que afectaban a su país.
En un mensaje en inglés publicado en la red social X y posteriormente replicado por la Secretaría de Prensa de la Presidencia, Bukele expresó: «Podemos arreglarlo. Pero necesitaremos una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, el consentimiento del país anfitrión y cubrir todos los gastos de la misión».
Sin embargo, no proporcionó detalles sobre cómo abordaría la crisis en Haití, donde las pandillas armadas han desencadenado una espiral de violencia, especialmente en la capital, Puerto Príncipe, con hospitales bajo ataque, escasez de alimentos e infraestructuras bloqueadas.
Actualmente, grupos y parte de la población haitiana exigen la renuncia del primer ministro, Ariel Henry, quien se encuentra fuera del país. Las pandillas han estado atacando comisarías, tribunales y prisiones, provocando la fuga de miles de presos, lo que ha generado preocupación a nivel internacional.
A pesar de que el Consejo de Seguridad de la ONU autorizó en octubre el envío de una misión internacional de seguridad a Haití dirigida por Kenia, su despliegue se ha retrasado debido a decisiones judiciales en Kenia y a la falta de financiación.
Bukele fue reelegido como presidente de El Salvador en febrero con el 85% de los votos, un apoyo que obtuvo gracias a su política contra las pandillas, que logró devolver la tranquilidad a las calles del país.
