Este lunes, Ucrania convocó al enviado del Vaticano como protesta por las declaraciones del papa Francisco, quien el fin de semana instó a Kiev a «tener el coraje de izar la bandera blanca y negociar» con Rusia.
«Visvaldas Kulbokas fue informado de que Ucrania está decepcionada con las palabras del pontífice sobre la ‘bandera blanca’ y la necesidad de ‘demostrar coraje y negociar’ con el agresor», declaró el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.
La diplomacia ucraniana acusó al papa de «legalizar la ley del más fuerte» y de alentarlos a «seguir ignorando el derecho internacional».
«El líder de la Santa Sede debería haber enviado señales a la comunidad internacional sobre la necesidad de unir fuerzas inmediatamente para asegurar la victoria del bien sobre el mal, y hacer un llamado al agresor en lugar de a la víctima», afirmó Kiev.
El presidente Volodimir Zelenski reaccionó duramente el domingo a las palabras del pontífice argentino y aseguró que su país «nunca» izará la bandera blanca ante Rusia.
En una entrevista con la televisión pública suiza RTS emitida el sábado, Francisco fue preguntado por las posibilidades de resolver el conflicto en Ucrania y pidió que no se tenga «vergüenza de negociar antes de que las cosas empeoren».
Desde el sábado por la noche, el Vaticano ha intentado aclarar las declaraciones, precisando en un comunicado que la expresión «bandera blanca» se refería en este caso a «un cese de las hostilidades, una tregua conseguida con el coraje de negociar», y no a una rendición.
Francisco, líder de la Iglesia católica desde 2013, ya había sido criticado durante los primeros meses de la invasión rusa en Ucrania por no señalar claramente a Rusia como el agresor.
La ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, criticó el polémico llamado del papa Francisco para que Ucrania negocie con Rusia, expresando su desconcierto ante esta postura.
«Realmente no lo entiendo», declaró la ministra alemana en un programa de la cadena pública ARD el domingo. «Creo que hay cosas que solo puedes comprender si las experimentas por ti mismo», agregó Baerbock, quien ha viajado a Kiev en varias ocasiones desde el inicio de la guerra.
Baerbock comentó que cuando habla con niños ucranianos que sufren a causa del conflicto, se pregunta: «¿Dónde está el papa? El papa debería saber de estas cosas».
«Debemos apoyar a Ucrania y hacer todo lo posible para garantizar que pueda defenderse», enfatizó Baerbock. Alemania es el segundo mayor proveedor de ayuda militar a Ucrania, después de Estados Unidos.
El gobierno de Kiev también criticó duramente el domingo las palabras del papa y aseguró que nunca se rendirá ante Rusia.
«Nuestra bandera es amarilla y azul. Esta es la bandera por la que vivimos, por la que morimos y por la que triunfaremos. Nunca alzaremos otras banderas», declaró el ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Dmitro Kuleba, en un mensaje en la red social X.