Declaran culpable al hijo del presidente de EE.UU.  Hunter Biden de los tres cargos que enfrentaba en un juicio penal

Un jurado condenó a Hunter Biden por los tres cargos federales por los que se enfrentaba en un caso de armas, concluyendo que violó las leyes destinadas a prohibir que los drogadictos posean armas.

La condena es la primera en la que un miembro de la familia inmediata de un presidente ha sido declarado culpable de un delito durante el mandato de su padre, a pesar de que sus delitos fueron cometidos antes de que Joe Biden asumiera el cargo de presidente.

Los tres cargos resultaron de un arma de fuego que Hunter Biden compró en una armería de Delaware en octubre de 2018. El jurado emitió veredictos de culpabilidad después de una deliberación que duró algo menos de tres horas. El primer cargo fue por mentir sobre su consumo de drogas en un formulario federal de verificación de antecedentes, mientras que el tercer cargo fue por poseer un arma mientras era adicto o consumía drogas ilegales.

Hunter Biden, segundo desde la izquierda, observa cómo los miembros del jurado abandonan la sala del tribunal para deliberar en Wilmington, Delaware, el 11 de junio. (Bill Hennessy)
Una larga condena de hasta 25 años

Hunter Biden podría enfrentar una sentencia de hasta 25 años de prisión y una multa de hasta US$ 750.000 en caso de ser condenado, aunque es probable que la sentencia sea mucho menor al máximo posible como convicto primario.

Después del fallo, los fiscales se negaron a hacer declaraciones.

El resultado pone fin a una etapa difícil para la familia Biden, así como para muchos de sus miembros que participaron directamente en el conflicto legal. Hunter Biden estaba en el asiento del acusado, y algunos miembros de la familia, incluida la primera dama Jill Biden, estuvieron en la sala mostrando su apoyo. Poco después de que se leyera el veredicto, la primera dama llegó al tribunal.

La sentencia de Hunter Biden es el resultado de una extensa investigación del Departamento de Justicia que comenzó en 2018 y aumenta las expectativas para su segundo juicio programado por delitos fiscales federales, que se llevará a cabo en septiembre.

David Weiss, quien fue el fiscal estadounidense designado por Trump en Delaware, ha sido el encargado de supervisar ambos casos. El equipo de fiscales de Weiss ha negado vehementemente las acusaciones de los abogados de Hunter Biden de que los casos tienen motivaciones políticas en los veredictos de culpabilidad en el caso de las armas.

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