El lunes, el FBI anunció que obtuvo acceso al teléfono de Thomas Matthew Crooks, el sospechoso del intento de asesinato fallido contra el ex presidente de EE. UU. Donald Trump, mientras se continúa investigando la causa del crimen.
El FBI destacó que su investigación sobre el atentado del sábado, que se considera un intento de asesinato y posible acto de terrorismo, aún está en sus primeras etapas.
“Los especialistas técnicos del FBI obtuvieron acceso con éxito al teléfono de Thomas Matthew Crooks y continúan analizando sus dispositivos electrónicos”, dijo el FBI en un comunicado. “La búsqueda de la residencia y el vehículo del sujeto está completa”.
La oficina informó que ha llevado a cabo cerca de 100 entrevistas con agentes del orden, asistentes al evento y otros testigos.
Durante una conferencia de prensa el domingo, representantes del FBI informaron que hasta el momento no han podido identificar una ideología o encontrar pruebas de un motivo para el tiroteo.
Los oficiales dijeron que no había indicios de que el sospechoso tuviera un problema de salud mental, y el padre del atacante compró legalmente el arma de fuego 556 estilo AR.
Además, dijeron que una revisión preliminar de las llamadas y mensajes de texto recientes del atacante no reveló su motivación o si otras personas podrían haber sido conscientes de sus planes previos.
En un ataque en un mitin en Butler, Pensilvania, en el que un seguidor de Trump perdió la vida y otros dos resultaron heridos, Crooks, de 20 años, fue asesinado a tiros por agentes del Servicio Secreto.
El Servicio Secreto de hará una revisión interna
Después de que un hombre lograra disparar contra el ex presidente Donald Trump, el Servicio Secreto de Estados Unidos prometió colaborar con una revisión independiente sobre su sistema de seguridad este lunes.
A menos de cuatro meses para las elecciones de noviembre, un ataque que conmocionó a un país muy polarizado resultó en la herida del magnate de 78 años en un mitin en Pensilvania el sábado.
“El Servicio Secreto trabaja con todas las agencias federales, estatales y locales involucradas en entender qué sucedió, cómo sucedió y cómo se puede evitar que un incidente así vuelva a ocurrir”, dijo la directora de la agencia, Kimberly Cheatle, en un comunicado.
“Entendemos la importancia de la revisión independiente anunciada ayer por el presidente (Joe) Biden y participaremos plenamente. También trabajaremos con los comités apropiados del Congreso en cualquier acción de supervisión”, añadió Cheatle.
Desde el sábado, el Servicio Secreto ha estado bajo una fuerte presión debido a la crítica de que un hombre armado logró subir a una azotea a unos 150 metros de una figura política altamente protegida y apuntar con un rifle de asalto.
La agencia ha sido reprochada por no haber recibido advertencias de personas que vieron al hombre antes de que abriera fuego.
El director del Servicio Secreto, James M. Cheatle, ha declarado que la agencia está trabajando para reforzar la seguridad en la convención, donde Donald Trump hablará el lunes. El domingo, el Servicio Secreto aseguró estar completamente preparado para el evento partidista.
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