El 10 de agosto, Ismael El Mayo Zambada publicó una misiva en la que explica cronológicamente cómo su ahijado, Joaquín Guzmán López, traicionó al líder del Cártel de Sinaloa, con la intención de ser llevado a los Estados Unidos, donde ambos fueron detenidos.
Zambada García ofreció una explicación de cómo ocurrió su secuestro y cómo fue llevado al aeropuerto de Santa Teresa, Nuevo México, EEUU, durante la mañana del sábado.
“En esta declaración proporcionaré los hechos verdaderos de lo que ocurrió ese día. Quiero decir desde el principio que no me entregué ni vine voluntariamente a los Estados Unidos, ni tenía ningún acuerdo con ninguno de los dos gobiernos. Al contrario, fui secuestrado y llevado a los EEUU a la fuerza y contra mi voluntad”.
Mayo Zambada, de 76 años, informó que su ahijado, Joaquín Guzmán López, lo llamó a una reunión con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha. Además, Héctor Melesio Cuén Ojeda, exalcalde de Culiacán y exrector de la UAS, estaría presente.
El propósito de la reunión, en la que también participaría Iván Guzmán Salazar, era acordar quién asumiría la rectoría de la UAS.
“Llegué un poco antes. Supuse que los sicarios de Joaquín Guzmán y sus hermanos eran muchos hombres con uniformes verdes. Dos de los cuatro elementos de seguridad que lo acompañaban se quedaron fuera del perímetro. La carta dice: «José Rosario Heras López, comandante de la policía judicial del estado de Sinaloa, y Rodolfo Chaidez, un antiguo miembro de mi equipo de seguridad, fueron los dos que ingresaron conmigo».
Héctor Melesio Cuén Ojeda, acompañado de uno de sus asistentes, fue colocado en el lugar, según el líder más antiguo del Cártel de Sinaloa. Ingresó a una habitación donde se encontraba su ahijado, señaló, “a quien conozco desde que era un niño”.
“Confiando en la naturaleza de la reunión y en las personas involucradas, lo seguí sin dudarlo. Me llevó a otra habitación que estaba a oscuras”, sitio donde fue sujetado por un grupo de hombres que le colocaron un pasamontañas en la cara para después maniatarlo.
“Luego me forzaron a subir a la parte trasera de una camioneta. Durante todo este calvario, fui sometido a abusos físicos que resultaron en lesiones significativas en mi espalda, rodilla y muñecas. Luego me llevaron a una pista de aterrizaje a unos 20 o 25 minutos de distancia, donde me obligaron a subir a un avión privado”, explicó Zambada García.
Mike Vigil, el exjefe de Operaciones Internacionales de la DEA (Agencia Antidrogas de EEUU), consideró la carta como una telenovela llamada «Narco-Payasos».
“Mayo Zambada no es una persona ignorante”, afirmó el ex agente de la DEA en una entrevista con Infobae México. Por ser ignorante, no participó en el negocio del narcotráfico y se convirtió en el líder del cártel más poderoso del mundo.
“Pienso que él no escribió esa carta. Esa carta fue escrita por el abogado y para mí era totalmente ilógico. Mayo Zambada, que tiene una recompensa por su cabeza de 15 millones de dólares, sale de la sierra y se mete a la zona de Culiacán, donde todo el mundo lo conoce, para estar ahí con el gobernador de Sinaloa y el rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa y hablar sobre una disputa que ambos tienen de quién debe de estar encargado de esa universidad. Eso no tuvo nada de sentido”.
Zambada no permitió que hombres armados y vestidos de militar participaran en la reunión a la que fue convocado, y tampoco permitió que Iván Archivaldo Guzmán Salazar participara, ya que era su adversario.
“La pregunta aquí es, ¿Dónde estaba su escolta cuando todo esto estaba pasando? Todo lo que cuentan ahí no tiene sentido para mí, sabiendo cómo piensan los narcos”, expresó el ex agente de la DEA.
“El abogado defensor está tratando de formar una defensa para Mayo Zambada. Yo todavía sigo con que fue una traición, un engaño. La carta es como tratando de formar la defensa”, indicó Vigil quien piensa que de seguir con la narrativa de secuestro, su juicio quedará anulado y tendría que ser deportado a México.
Según la Corte Suprema de Estados Unidos, en el caso de Humberto Álvarez Machine, el doctor que fue torturado y interrogado en 1985 al ex agente de la DEA, Enrique Kiki Camarena, y que fue secuestrado en territorio mexicano para ser trasladado a EEUU y juzgado, los abogados de Mayo Zambada, Ray Velarde y Frank Pérez no saben que una persona era secuestrada mientras se demostrara su culpabilidad.
Se sospechaba que Álvarez Machine, un ginecólogo y cirujano de Guadalajara, ayudó a mantener con vida y drogar al ex agente de la DEA. Al ser interrogado por Caro Quintero, Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, no murió.
La defensa legal del médico mexicano apeló su detención después de ser trasladado a los Estados Unidos. Argumentó que su secuestro fue realizado por policías y ex militares mexicanos.
El juez Edward Rafeedie determinó que no se presentaron pruebas suficientes para procesar al médico cirujano, por lo que el ginecólogo fue absuelto.
“Esa defensa de que fue secuestrado ( El Mayo Zambada) no va a tener ningún valor aquí en los Estados Unidos. A Álvarez Machine lo liberó un juez, pero no era porque fue secuestrado. El juez dijo que no había suficientes pruebas suficientes y evidencia para juzgarlo. La Corte Suprema decidió en ese caso que no importa si fuiste secuestrado, tú estás adelante de la Corte y ahora te vamos a juzgar”, explicó el ex agente de la DEA a esta casa editorial.
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