A pesar de las afirmaciones que se han hecho durante meses, los latinos no están uniéndose en gran cantidad a las filas del Partido Republicano. Una encuesta reciente indica que, a pesar de que el presidente Joe Biden mantiene su ventaja, una gran cantidad de electores hispanos evitan el bipartidismo.
El 59% votaría por Biden y el 39% por Trump en una elección entre los dos. Sin embargo, si un tercer candidato se une, los porcentajes caen a 47% y 34% respectivamente, ya que un 17% prefiere una alternativa a los dos partidos principales.
“Lo que vemos es que no hay un significativo giro a la derecha entre los votantes latinos, en su lugar, hay muchos que están frustrados con un sistema bipartidista y están considerando seriamente votar por un tercer partido”, ha afirmado la presidenta de Voto Latino, María Teresa Kumar.
La encuesta, realizada por GQR entre 2.000 electores latinos en Arizona, Carolina del Norte, Nevada, Texas y Pensilvania, fue realizada por esta organización que apoya al Partido Demócrata.
En particular, el candidato independiente Robert F. Kennedy representa un riesgo para el demócrata, con un 12% de los votos, mientras que Cornel West obtiene un 3%, Jill Stein, la candidata del Partido Verde, un 2% y un 1% es indeciso.
Según Kumar, el Partido Demócrata debería enfocarse en definir las políticas que defiende Kennedy. “Es el momento de que las campañas definan a Kennedy y demuestren que también es un extremista de derechas en línea con Trump (…) Es hora de tomarlo en serio y decirles a las personas que votar por él es votar por Donald Trump”, ha declarado recientemente.
Jóvenes y mujeres prefieren una tercera opción
Las mujeres y los jóvenes son más propensos a votar por un tercer candidato debido a su vulnerabilidad ante la economía. Más del 35% de los jóvenes latinos ha solicitado ayuda gubernamental en el último año y el 52% ha pospuesto la compra de una casa o un coche.
Ameer Patel, director de programas de Voto Latino, explica que los votantes hispanos en general creen que Biden hace un mejor trabajo en temas como el cambio climático, la democracia o el aborto. Sin embargo, en cuanto a la economía, la opinión está dividida o Trump tiene una ventaja potencial.
En un año electoral con cuatro millones de nuevos votantes latinos, uno de los desafíos es motivar a los jóvenes a votar, ya que tienen un alto nivel de desencanto y se sienten desconectados de la política. Según la encuesta, solo el 37% de los jóvenes votantes muestra entusiasmo por las elecciones, siendo mayor entre los republicanos que entre los demócratas.
La campaña de Biden ha tenido problemas para demostrar los logros económicos alcanzados en los últimos cuatro años. Aunque los datos han demostrado la capacidad de recuperación de la economía estadounidense, la tasa de inflación sigue siendo elevada por encima de lo esperado y está teniendo un impacto negativo en el candidato demócrata.
El 52% de los encuestados elige la inflación y el coste de la vida como el principal factor que determina su voto, mientras que el empleo ocupa el segundo lugar, con el 28% de las respuestas. En total, cuatro de cada cinco encuestados sitúan la economía como su mayor preocupación. “Es imposible exagerar el impacto de la inflación y la economía en el electorado hispano. Y es mucho peor sugerir a estos votantes que sus esfuerzos económicos reflejan información errónea”, advierte la encuesta.
Nevada es el estado que necesita más atención y ofrece más posibilidades para conseguir el apoyo del voto latino, mientras que Pensilvania es el estado en el que los demócratas tienen menos margen de crecimiento.
Dos temas que influirán en el voto latino son el aborto y la seguridad en la frontera. La encuesta de GQR se realizó antes de que Biden firmara el decreto que endurece la entrada de migrantes y el derecho a pedir asilo.
El voto latino es crucial en estas elecciones, con más de 36 millones de electores que pueden inclinar la balanza. En 2020, seis de cada diez latinos votaron por Biden, pero el respaldo de la comunidad había disminuido desde 2016. Aunque se ha hablado de un traspaso del voto latino hacia el Partido Republicano, muchos expertos son escépticos sobre la significancia de este cambio.
En lo que sí ha coincidido la mayoría es en que el Partido Demócrata ha dado por hecho que tiene el voto hispano asegurado, cuando las encuestas hasta la fecha han mostrado lo contrario. El sondeo publicado ayer, que da la vuelta a esa tendencia estadística, se realizó entre el 25 de abril y el 7 de mayo y tiene un margen de error general de 2,19 puntos porcentuales. Un 77% de las respuestas se obtuvo por mensaje de texto, mientras que el 23% restante se realizó en línea, donde el margen de error es mayor.
«Latinos Americanos por Trump»
El equipo de campaña de Trump cambió el eslogan de «Latinos por Trump» por «Latino Americanos por Trump» la semana pasada, en un intento de ganar el respaldo de la comunidad. Sin embargo, este cambio choca con la retórica antiinmigrante que el candidato republicano ha mantenido durante la campaña, insultando a los latinos y comparándolos con delincuentes y terroristas.
Los encuestados han argumentado que el racismo y la democracia son las razones principales por las que no votarían por Trump, seguidos de los recortes de impuestos a las empresas. Sin embargo, entre los jóvenes, las motivaciones para no votar por el candidato republicano son la política a favor de las armas y la prevista desaparición del programa de salud Obamacare. El mes pasado, Trump se presentó en la reunión anual de la Asociación Nacional del Rifle y se comprometió a proteger el derecho a las armas, lo que le permitió obtener el apoyo de uno de los grupos por los cuales no tendría que preocuparse.
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