Gustavo Sánchez, el ministro de Seguridad, confirmó que tanto expolicías como exmilitares estaban involucrados en las masivas desapariciones ocurridas en el norte de Honduras en las últimas semanas.
Según él, existen varios componentes que se derivan de los masivos secuestros de personas en Tela (Atlántida) y Baracoa (Cortés), pero no se pueden especificar debido a los avances en las investigaciones.
En relación a las afirmaciones del abogado Carlos Chajtur de que hay expolicías y exmilitares involucrados en los secuestros masivos en el norte del país, comentó que el experto en derecho afirma ciertas verdades a medias y que es responsabilidad de la Secretaría de Seguridad informar a la otra parte para evaluar la situación.
“Uno de los secuestrados que él menciona que es ingeniero es hermano de alias ‘Chafalo’ pedido en extradición y está en la PN (Penitenciaría Nacional). El abogado Chajtur es el abogado de él, es una acción lícita profesional de él porque es abogado, pero coincidentemente también fue abogado de (Julissa) Bandy, de Magdaleno Meza, fue abogado de otro narcotraficante pedido en extradición que no recuerdo”, desglosó.
“Hay expolicías secuestrados y se supone que hay expolicías en las bandas que secuestran, también hay exmilitares, pero eso no significa que el problema sea la Policía”, subrayó.
Estructuras uniformadas
Defendió que los cuerpos de seguridad del Estado se enfrentan a estructuras criminales uniformadas con un gran equipo táctico.
La otra estructura fue secuestrada por la primera. Según él, las bandas criminales están replanteando un mercado criminal debido al descabezamiento y la extradición histórica de personas.
En relación al incidente en Villas Mckay de San Pedro Sula, el familiar de uno de los secuestrados, quien es expolicía, fue recientemente detenido en una operación policial. “Estos jóvenes, donde estalló una granada, estaban reuniéndose para ir a rescatar y enfrentarse a la otra estructura criminal, donde se incautaron hasta lanzagranadas es parte de la estructura criminal que está secuestrada”, ahondó.
Según él, a pesar de la depuración de la Policía en 2016, la droga seguía circulando por Honduras debido a que el principal narcotraficante era el expresidente Juan Orlando Hernández, quien acaba de ser sentenciado a 45 años de prisión en Estados Unidos.
Según él, una de las modificaciones solicitadas al Poder Legislativo es la inclusión de uniformes o atuendos similares por parte de la policía y la fuerza armada. Debido a que existe una planificación bajo este patrón en la comisión de delitos, la pena por esta falta aumentaría en una tercera parte.
Defendió que los uniformes policiales están registrados e inventariados, con chip, por lo que es poco probable que un miembro de la institución los preste sabiendo que corre el riesgo de ser imputado por un delito penal.
El ministro Sánchez argumentó que el crimen organizado está afectando a toda la estructura del Estado, por lo que están haciendo todo lo posible para deslegitimar a las fuerzas de seguridad y defensa.
Agregó que los transportes de armas se encuentran en constante movimiento en Centroamérica, lo que se suma al robo de armas y municiones de las propias instalaciones del Estado. “Además, tenemos a uno de los ejecutivos de la Tasa de Seguridad extraditado y preso en Estados Unidos”, evidenció.
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