Después del magnicidio de Jovenel Moïse en 2021, hombres armados que serían miembros de las pandillas que controlan gran parte de la isla tomaron el Palacio Nacional este lunes.
Según la agencia EFE, hay varios trabajadores atrapados en el lugar y al menos cinco agentes de policía resultaron heridos, uno de ellos gravemente.
Las llamas comenzaron en el área del Campo de Marte, un extenso parque público cerca del Palacio.
Jimmy Cherizier, conocido como Barbecue, un expolicía que ahora dirige varias pandillas en la capital haitiana, lideraría la toma del Palacio Nacional.
Desde finales de febrero, varias pandillas se unieron para atacar áreas clave en Puerto Príncipe, como comisarías, cárceles, el aeropuerto y el puerto, en un enfrentamiento con el primer ministro Ariel Henry, quien buscaba consolidar su posición de poder, por lo que «Barbecue» amenazó con un genocidio si Henry no dejaba su cargo.
El dirigente, muy cuestionado por el aumento de la violencia y por llegar al poder sin someterse al voto popular, anunció el 11 de marzo que dimitía al cargo y cedería el poder a un consejo presidencial de transición.
Incontrolable ola de violencia
Pero tres semanas después, Haití aún espera el nombramiento de ese consejo de nueve miembros, cuya creación fue supervisada por la Comunidad del Caribe (Caricom).
Los desacuerdos internos y las supuestas dudas legales del gobierno saliente han retrasado la instalación de las nuevas autoridades, que están compuestas por representantes de partidos políticos, sociedad civil, sector privado y comunidades religiosas.
El ejecutivo de Henry dijo en un comunicado publicado este lunes que no pudo nombrar al consejo presidencial porque la Constitución haitiana no incluye esa institución.
El gobierno saliente solicitó al presidente temporal de la Caricom, el guyanés Irfaan Ali, que presentara un borrador de decreto para establecer el consejo. Según el comunicado, el consejo de ministros saliente recibió el documento y lo envió a juristas para que lo revisaran.
Antes de que comience la transición política, Haití se encuentra en una situación de crisis humanitaria grave y las autoridades no han logrado detener la violencia.
Catástrofe
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) describe una situación «catastrófica» en Haití.
La ONU alertó el 28 de marzo de que la situación en Haití es «catastrófica», con 1.554 muertos en los primeros tres meses de 2024. La ONU lamentó que las «fronteras porosas» faciliten el suministro de armas a las pandillas que operan en el país.
“Es escandaloso que, a pesar del horror de la situación en el terreno, sigan llegando armas. Pido una aplicación más eficaz del embargo de armas”, declaró el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, en la presentación de un nuevo informe.
“Factores estructurales y especulativos han llevado a Haití a una situación catastrófica, caracterizada por una profunda inestabilidad política y unas instituciones extremadamente frágiles”, señala el informe.
Según la ONU, “la corrupción, la impunidad y la mala gobernanza, agravadas por los crecientes niveles de violencia de las pandillas, erosionaron el Estado de Derecho y llevaron a las instituciones del país al borde del colapso”.
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