En medio de la crisis energética renovada que atraviesa Venezuela y la ofensiva contra la oposición venezolana, que sigue desafiando los resultados electorales publicados por el Consejo Nacional Electoral, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció que adelantará las fiestas decembrinas en el país.
“Es septiembre y ya huele a Navidad, huele a Navidad. Y por eso este año, en homenaje a ustedes, en agradecimiento a ustedes, voy a decretar el adelanto de la Navidad para el 1 de octubre para todos y todas. Llegó la Navidad con paz, felicidad y seguridad”, dijo Maduro.
Maduro ha dictado un retraso en las festividades en el país en el pasado. En medio de la pandemia, el líder ya había programado el inicio de la Navidad para el 15 de octubre en 2020. Un año más tarde, Maduro programó las festividades para el 4 de octubre.
¿Será una estrategia el adelantar la Navidad?
El calendario electoral se ve afectado por el anuncio. El próximo 10 de enero, después de Navidad, se espera que el nuevo presidente asuma el cargo. Se preocupa que esta sea una estrategia de Maduro para consolidar su posición en el poder, a pesar de que la oposición sigue oponiéndose a los resultados que lo confirmaron como el vencedor de las elecciones.
La determinación se toma en medio de una nueva ofensiva en contra de la oposición en Venezuela. El lunes, un tribunal en Venezuela emitió una orden de detención contra Edmundo González Urrutia, un opositor que celebra su triunfo en las elecciones presidenciales del 28 de julio. La fiscalía solicitó su arresto por presuntos delitos relacionados con los comicios, como «desobediencia de leyes» y «conspiración».
González Urrutia y María Corina Machado, quienes están en la clandestinidad, han sido encarcelados por Maduro. Tarek William Saab, el fiscal general, había iniciado una investigación criminal contra ambos por «incitar a la insurrección» militar después de pedir a los militares que reconocieran la victoria del líder opositor.
Sin embargo, esto también podría ser una estrategia para distraer la atención del público de una crisis energética aparentemente renovada en el país. El viernes pasado, se produjo un apagón de más de 12 horas en varias regiones de Venezuela, el cual fue considerado por el gobierno como un «sabotaje» de la oposición en sus acusaciones de fraude electoral. Sin embargo, los expertos creen que el problema se debió a una falla y colapso del sistema eléctrico.
El viernes por la madrugada, la falla se produjo en la hidroeléctrica Simón Bolívar, que es la principal generadora de electricidad en Venezuela. La nación se quedó sin luz, reviviendo el fantasma del apagón masivo de 2019 que duró en promedio cinco días. El lunes, al anunciar la llegada de la Navidad, Maduro destacó la importancia del apagón y afirmó que no obstaculizará la salida de la gente para celebrar.
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