En los últimos días, se ha propagado el nombre de Rebeca García, una mujer originaria de Venezuela que ha sido acusada de agredir a otras mujeres en El Haltillo, ubicado en el estado Miranda, en Venezuela, durante más de siete años.
Las víctimas que informaron sobre los casos en las redes sociales han exhibido conversaciones comprometedoras y hasta videos de las formas aterradoras en las que parecen estar siendo perseguidas.
Una usuaria llamada Anny De Trindade fue la primera en informar sobre el evento a través de su cuenta de X. Ella informó que la supuesto asediadora la ha estado persiguiendo desde 2020, desde cuando comenzó a enviarle correos electrónicos y escribirle en redes sociales en varias ocasiones. Además, el hecho ha llegado a un punto en el que le envía cosas a su trabajo.
Acoso de años
“Desde 2020, aproximadamente, esta mujer me ha llamado de diferentes números de teléfono, escrito por Instagram, insiste en mandarme regalos a mi trabajo e incluso me dejo un grafiti de bello monte”, señaló la víctima.
La mujer adjuntó varias imágenes de correos electrónicos que supuestamente Rebeca le había enviado, afirmando que fueron 76 mensajes en un solo día. Estos contienen numerosos insultos y amenazas por no recibir respuesta.
Anny De Trindade permitió que otras mujeres que enfrentan la misma situación comenzaran a contar cómo García habría estado persiguiéndolas y superando todos los límites.
Más denuncias aterradoras
Otra internauta afirmó que el acoso ha llegado hasta el punto de que la mujer arribó hasta su vivienda. “A mí me ha acosado por más de 7 años, acoso que ha llegado hasta la puerta de mi casa invadiendo mi espacio seguro”, señaló.
La persona que se identificó como Couquirou dijo que nunca había tenido una relación cercana con Rebeca. Según ella, lo más parecido es que ella y él estuvieron estudiando juntas en la misma escuela. Sin embargo, insistió en que durante ese tiempo no habló con ella.
La víctima dijo que otra de sus amigas estaba pasando por lo mismo y que se vio obligada a salir del país porque temía lo que esta mujer pudiera hacer. “Empezó descubriendo dónde vivíamos, nuestros números de teléfono y correos”, declaró.
“En 2020, año de la pandemia, el acoso de Rebeca incrementó. Vino casi diariamente a mi edificio, llenó de grafitis toda mi calle con mi nombre, mi apellido, mi usuario. Mandaba motorizados a entregarme cosas. Cientos de mensajes diarios. Creó cuentas con mi nombre”, denunció con una foto que muestran las palabras que escribió en su momento la presunta acosadora.
La víctima dijo que Rebeca había estado internada en un centro psiquiátrico, pero al salir volvió a tener los mismos hábitos. En el parqueadero de su hogar, la usuaria logró grabar un encuentro con la presunta agresora en video, en el que la mujer se subió al capó del automóvil e intentó romper el cristal.
“Son siete años de miedo a salir sola, de tener que esconderme, de tener que explicar por qué mi nombre está escrito por toda mi calle, de tener miedo”, escribió.
Poco a poco se han ido conociendo más mujeres que afirman haber sido víctimas de Rebeca, lo que ha llevado a que las fotos y videos de la mujer se vuelvan virales en las redes sociales y muchos piden a las autoridades que actúen antes de que ocurra una tragedia. Una de las víctimas dijo: «Rebeca aún no ha matado a ninguna de sus víctimas, fantasea con hacerlo y es cuestión de tiempo para que ocurra una tragedia».
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