Considerado el primer huracán de la temporada en el Atlántico y con una poderosa categoría 4, Beryl es sin duda un ciclón que rompe récord y su trayectoria podría ser sinónimo de muerte y destrucción. Aquí te decimos lo más reciente en información:
Se emitió una advertencia de huracán para una parte de la Península de Yucatán, México, desde Puerto Costa Maya hasta Cancún. Además, hay una advertencia de huracán activa desde el norte de Cancún hasta Cabo Catoche, y desde el sur de Puerto Costa Maya hasta Chetumal.
Se espera que Beryl afecte a esta región durante el jueves y viernes. La tormenta se aproxima a Jamaica: Beryl sigue siendo un huracán peligroso de categoría 4 con vientos sostenidos de 145 mph (233 km/h).
El huracán se desplaza hacia el oeste-noroeste a 18 mph (29 km/h) y se encuentra a 75 millas (unos 120 km) al sureste de Kingston, Jamaica.
Se prevé que el centro de Beryl pase justo al sur, muy cerca de Jamaica, durante la tarde de este miércoles.
Los vientos con fuerza de tormenta tropical se han extendido por la mitad oriental de la isla y es probable que los vientos con fuerza de huracán lleguen en una o dos horas.
El primer ministro de Jamaica pide cumplir órdenes de evacuación
En una declaración grabada en video este miércoles, el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, instó a los ciudadanos a seguir las órdenes de evacuación mientras el huracán Beryl se acerca a la isla caribeña.
«Instamos a todos los jamaicanos a cumplir con las órdenes de evacuación, siempre y cuando se emitan», dijo.
Si vives en una zona baja y es históricamente propensa a las inundaciones y deslizamientos de tierra o, si vives en las orillas de un río o un barranco, les imploro que evacuen a un refugio o a un terreno más seguro, incluso sin la emisión de un aviso.
Beryl tocó tierra el lunes como huracán de categoría cuatro, con vientos sostenidos de 240 km/h.
Miles de personas siguen sin electricidad y muchas se encuentran en refugios temporales en San Vicente y las Granadinas, Granada y Santa Lucía.
Sin embargo, a pesar del caos y la falta de vivienda en cada rincón de la isla, Sebastian Sailly se siente agradecido de que las cosas no hayan sido aún peores.
Te puede interesar: