Durante años, diversos investigadores se han dedicado a estudiar los beneficios físicos y psicológicos que podría tener el sexo frecuente. Entre ellos destacan la estabilización de la tensión arterial, el fortalecimiento del sistema inmunológico, y la estimulación del sueño, entre otros.
El acto sexual, y en muchos casos el orgasmo, libera varias hormonas, incluida la oxitocina, conocida popularmente como la hormona del amor, que fomenta la confianza y crea vínculos entre los participantes del encuentro íntimo.
El sitio web ‘Science Alert’ afirma que el número de personas que sufren un ataque cardíaco durante el acto sexual es extremadamente bajo, representando solo el 0.6% de todos los casos de muerte súbita registrados en un año.
El estudio, titulado ‘Muchas personas mueren cada año durante o después de tener relaciones sexuales’, fue publicado en el sitio web ‘Science Alert’. En el informe de la investigación, los expertos explican por qué algunas personas enfrentan estos ataques.
La publicación menciona que en la mayoría de los casos, el ataque cardíaco durante el acto sexual es causado por el esfuerzo físico de la actividad sexual, el uso de medicamentos recetados (especialmente medicamentos para tratar la disfunción eréctil) o drogas alucinógenas.
Además, explican que el riesgo de padecer algún tipo de enfermedad cardiaca súbita aumenta a medida que las personas envejecen. Los investigadores estudiaron varios expedientes de personas que fallecieron a causa de ataques cardíacos durante el acto sexual y determinaron que:
«La muerte súbita ocurre mayoritariamente en hombres (con una edad promedio de 59 años) y la causa más frecuente es un ataque cardíaco, también conocido como infarto de miocardio. Los estudios sobre muerte cardíaca súbita y actividad sexual realizados en EE. UU., Francia y Corea del Sur muestran hallazgos similares», se lee en el informe.