La ‘fábrica de lluvia’ con drones en Dubái


Los Emiratos Árabes Unidos se destacan como uno de los países con las temperaturas más altas a lo largo del año. Su clima, típicamente desértico, caracteriza tanto a la nación en su conjunto como a sus principales ciudades como Dubái. Este clima se distingue por la escasez de lluvias y veranos que son abrasadores, ventosos y húmedos, con temperaturas promedio que pueden alcanzar los 41 grados centígrados.

En los últimos años, en Dubái, se está utilizando un método innovador llamado ‘siembra de nubes’, este procedimiento para inducir los cambios de clima se realiza con drones para generar lluvia en medio del desierto.

Estos drones, fabricados por científicos de la Universidad de Reading en el Reino Unido, vuelan hacia las nubes y utilizan láseres para generar cargas eléctricas, lo que provoca que las nubes se agrupen y produzcan lluvia. Este método se considera menos intrusivo que el uso de productos químicos para provocar la lluvia, esto de acuerdo con información publicada en ‘National Geographic’.

Por siglos, la falta de agua en Emiratos Árabes Unidos ha sido uno de los principales problemas; sin embargo, en las últimas décadas este país ha surgido económicamente convirtiéndose en uno los más ricos de Oriente Medio, por lo que han podido implementar riesgosas estrategias para inducir la lluvia.

Con este sistema de ‘siembra de nubes’, se busca aliviar la escasez de agua en el país. Los drones realizan descargas eléctricas en las nubes, lo que desencadena la producción de lluvia y permite que llueva sobre el territorio.

El proceso de ‘siembra de lluvia’ es considerado por muchos como una ‘maravilla de la ciencia moderna’. Con el uso de drones especializados, los científicos e investigadores cargan las nubes con iones, lo que facilita la condensación y precipitación del agua almacenada en ellas.

Se sabe que el Gobierno de los Emiratos Árabes Unidos ha invertido bastante dinero en la implementación de estas tecnologías, así como liderar proyectos que exploran y refinan esta técnica de precipitación inducida.

Un artículo publicado en ‘National Geographic’ menciona que este método ha generado cierta controversia, ya que algunos estudios sugieren que su impacto en la generación de agua en el cielo es limitado, mientras que otros apuntan en sentido contrario. Sin embargo, los Emiratos Árabes Unidos continúan utilizando esta tecnología para abordar la falta de agua en el país.

El blog ‘Iagua’ menciona que la ‘fábrica de lluvia’ no está exenta de ciertos peligros asociados a estas prácticas. “Aunque la siembra de nubes con drones puede ser una solución innovadora para combatir la escasez de agua, existen algunos riesgos y preocupaciones que se deben tener en cuenta”, refiere el sitio web.

De igual forma asegura que: “Uno de los peligros potenciales está relacionado con la calidad del agua generada, pues, la lluvia artificial puede contener sustancias químicas o contaminantes presentes en la atmósfera, lo que podría afectar la calidad del agua y tener consecuencias negativas para el medio ambiente y la salud humana”.